Las industrias de hardware y procesamiento de metales dependen de acabados superficiales duraderos y estéticamente agradables para productos que abarcan desde carcasas de electrónica de consumo hasta herrajes arquitectónicos. Los sistemas de acabado automatizado de hardware son esenciales para lograr una calidad impecable en grandes lotes de producción.
Estas aplicaciones suelen implicar piezas pequeñas con geometrías muy complejas, rebajes profundos o ángulos intrincados. La pulverización manual tradicional genera una gran variabilidad. Los sistemas robóticos, en particular aquellos con una flexibilidad de unión avanzada, destacan por:
Recubrimiento multiángulo: la muñeca flexible del robot garantiza que la imprimación, la pintura o el polvo lleguen a cada superficie oculta y borde afilado, evitando la corrosión prematura.
Uniformidad de lote a lote: una vez que se enseña una ruta, el robot la repite perfectamente, garantizando que el acabado de la pieza 1000 sea idéntico al acabado de la pieza 1.
Alta tasa de utilización: estos sistemas a menudo pueden funcionar junto con mesas giratorias o lanzaderas, maximizando el tiempo de trabajo del robot y minimizando el tiempo de inactividad.



















